CAPITULO 1
PRIMER PASO.
Desde un punto cero y misterioso, de un lugar reflexivo, de un instante preciso de Auto-observación radical consigo mismo, se da inicio al primer paso hacia adentro y hacia arriba.
Misterioso movimiento tetra-dimensional dado en las grandes escuelas de misterios de los Siete Rayos sustentadores de la vida por los que dejan el valle del dolor, la mecánica e ignorancia, me refiero al Iniciado, al caminante de todos los puntos cardinales del esoterismo. Al de las Doce Tribus de IS-RA-EL, al de los Doce Trabajos de Hércules, al de las Doce constelaciones, al de los Doce reinos ANAHUAC, ETC.
El paso de la Muerte. “El que venga en pos de mi, niéguese así mismo”. El paso de la huesuda hermana; para que algo nazca, algo debe morir.
El ser humano es una semilla, cuya envoltura guarda una fracción de fuego con posibilidades de desarrollo. Las capas que la cubren o envuelven deben ser destruidas para que la llama aflore. Capa tras capa, velo tras velo debe la chispa cruzar, deshacerse de sus envolturas o armaduras que la cubren; es la muerte su compañera, es la muerte su amiga.
Cruza el iniciado el mar rojo de las tentaciones, del Egipto es sacado y en su cruce muchos mueren, muchos mueren. Los mata el agua, los mata el fuego, muchos mueren.
Uno es el que cruza, muchos lo acompañan, muchos mueren; a la manera de Arhuna diremos que muchos son los parientes queridos, los familiares y amigos; la representación de nuestros defectos, errores, vicios.
El Iniciado MOISES; nuestra Alma; da el primer paso, el de la fuga del mundo profano y aun con su pueblo a cuestas, Egipcios y Hebreos; ya que el es Egipcio y Hebreo; la representación de las dos polaridades del EGO, positivo-negativo, el bien y el mal, la guerra interior entre fariseos y saduceos, tirios y troyanos, Yin – Yan, los dos peces, los dos gemelos, etc.
La simbología esotérica encierra los grandes misterios. Figuras, dibujos, cuentos, historias, rituales, tradiciones, parábolas, son su forma a la vista de todos, pero todos no lo ven.
Desde el momento en que todo nace en la creación, todo comienza a morir, y sin embargo la muerte no se ve.
Nace el niño y muere ya anciano y la muerte no se ve. Es la mecánica de la existencia de universos, cosmos, galaxias, sistemas solares, planetas, etc. Nosotros no somos la excepción y la muerte no se ve.
“Si es posible padre mío apura este vaso, más no se haga mi voluntad, sino la tuya”. El iniciado debe beber hasta la última gota y comprender su dulzura y amargura, y en el fuego debes renacer y en la cruz debes morir.
El primer paso nos lleva hacia adentro y hacia arriba, nos va uniendo al Padre, al Ser, mediante la adquisición de virtudes, facultades, poderes; la chispa interior se va convirtiendo en llama y la llama en sol, RA de los Misterios Egipcios, el Sol de la vida de los Misterios Cristianos, El Disco o Piedra Solar de los Mayas, etc.
El primer paso se da con FE, su realización requiere de FE, en los objetivos, metas, resultados. La fuerza de la Fe es una energía de tipo superior que también se debe encarnar. La obra de Muerte acrecienta la FE.
El seudo-iniciado intelectual no comprenderá jamás, no experimentara jamás estos Misterios Esotéricos, solo, tal vez, los podrá leer, recordar, idealizar, pero sin vivencia solo será sombra profana.
Es realmente difícil encontrar alguien que seriamente quiera morir, el dejar, abandonar, renunciar a tanto apego, costumbre, habito y toda la concupiscencia interior.
La muerte física no produce tanto miedo o espanto, como el que produce la muerte consciente de nuestro propio ego. El deshacerse de nuestro orgullo, vanidad, auto-consideración, auto-engreimiento, desgarra más que el desgarro que produce el gusano al morir nuestro cuerpo.
Nuestro Fariseo interior con toda su camarilla no nos deja ser humildes y sencillos, el espanto ante la verdad es tal que Pilatos busca una y mil justificaciones para oponerse y lavarse las manos ante la LUZ.
Los sentimientos Judaicos se procesan tenazmente ante el corazón verdadero, su amargura chorrea la duda, la desesperanza y se esconde en la soledad del engaño y la ceguera.
Escapamos a la muerte, nos ocultamos en las cuevas psicológicas de nuestra mente, huimos de esta realidad y la muerte no la vemos.
Nace nuestro orgullo, pero mientras crece y se engorda ya esta muriendo y con ello nos mata, su fuego es lepra que corroe y se desvanece en mil años y con ello nos mata.
¿Cuál es la verdadera luz del orgullo? La oscura Luz de la fantasía, de la ilusión, del engaño. ¿Puede esta luz iluminar el camino hacia Dios? Solo si en el FUEGO SAGRADO muere.
La llama consumidora necesita material que la alimente. Las escorias egoicas son el carbón que mediante la combustión producen LUZ y Consciencia.
La sagrada Muerte Consciente es el Primer Paso esotérico conducente a la liberación, a la unión con aquello que ES, es decir, el YO SOY.
¿Qué es lo que realmente debe Morir? ¿Qué es lo que se debe desbastar o eliminar? Y ¿Cómo? Reflexión evidentemente es necesaria, auto-observación, inventario psicológico de si mismos. Ejemplo: Cuan orgullosos somos o que variedades de orgullo tenemos, ya que el orgullo no es uno solo, sino variadas manifestaciones poseemos. Orgullo de creernos superiores, orgullo de creernos buenos, orgullo de lo que sabemos, poseemos o no poseemos. Orgullo de títulos, grados, posiciones sociales, de lo adquirido, tanto material como psicológico o pseudo-espiritual, etc.
El inventario sincero, consciente y sin auto-ocultamiento o engaño nos dará un listado sorprendente de los variados aspectos o ramificaciones.
Decisión Consciente para dejar de ser lo que somos, las pruebas esotéricas no son otra cosa que eso, comprobación de si ya dejamos de ser lo que eliminamos o a lo que renunciamos.
Decisión: Voy a dejar este error, defecto o vicio. Voluntad para nunca volver a repetirlo, voluntad para no tropezar o caer, ese es el sentido de ella, la voluntad, es decir, mantención de un compromiso consigo mismo y con los procesos iniciáticos.
Ese es el primer grado Consciente de la Muerte Mística. Por Voluntad propia renunciar a …. Y mantener ese compromiso; nunca más prometo hablar de mis semejantes ausentes o presentes, esa es Muerte Mística Esotérica. ¿Es Ud. Capaz de mantener eso por voluntad y para siempre? Si es así bienvenido al camino esotérico, ya que este se camina con Tres Pasos y el primero y básico es de Muerte.
Un grado mas profundo de la Muerte Esotérica consiste en pedir a nuestro Ser, Dios en nosotros, Maestro interior o las partes de nuestro ser en nosotros, mediante la Oración que nos elimine tal o cual defecto que hayamos comprendido y que por decisión propia nos comprometamos a dejar, desbastar de si mismos.
Otro grado mas profundo de la Muerte Mística se da con el Fuego Sagrado que se produce entre Columnas como lo veremos en el Segundo paso.
Si la semilla no Muere, no veremos a la espiga crecer y sus frutos; las virtudes; no disfrutaremos.
La semilla es el EGO. Muerte al EGO.
Por sus frutos los conoceréis.
El Primer Paso es de MUERTE dadlo si realmente queréis ser Iniciado autentico y verdadero.
No os engañéis con grados y títulos de este mundo, que en el verdadero nada valen como nada valen los que los poseen y se ufanan de ello. Muerte al ego.